En la actualidad, hay 12.500 personas en esta situación en España. Una vez cumplida la mayoría de edad, deben salir de los centros de acogida con el permiso de residencia para poder trabajar.
La Generalidad de Cataluña acaba de aprobar una paga para aquellos que salen de los centros hasta que cumplen los 23 años. El único requisito para cobrar los 664 euros mensuales que les dará la Administración es estar apuntado a la formación reglada postobligatoria.
Según Cataluña En Comú, que es quien ha presentado esta propuesta, «un tercio de las personas que duermen en la calle son jóvenes, la mayoría niños que habían sido tutelados por el Govern, pero que al cumplir la mayoría de edad se han quedado sin ayuda alguna». Debido a eso, para «evitar la exclusión», la Administración les dará 664 euros por apuntarse a esos cursos hasta que cumplan los 23 años.