El Alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, cumplirá un año más con la tradición de representar al Ayuntamiento en la misa que cada 15 de agosto se celebra en la Basílica de Begoña, aunque, por segundo año consecutivo, el acto no incluirá la romería popular ni el tradicional aurresku que el primer edil de la Villa suele dedicar a las personas congregadas en el entorno del templo, debido a las restricciones sociosanitarias derivadas de la actual situación de pandemia por COVID-19.